Entrevista a Jorge Aleman: política y psicoanálisis

Sobre su exilio.
Argentino radicado en España, Madrid. Desde el 76.
Habla de la política española.

Es psicoanalista.
Hijo de padre peronista.
Nace en un hotel. Gusto por no estar en casa.
Relata su marca por un episodio de violencia con un grupo de jovenes del fútbol, durante su juventud. Ese episodio limite en su vida, lo mandó a las bibliotecas, para entender la violencia en el ser humano. Como era la lógica de la construcción de un grupo frente a una víctima propiciatoria.

Psicoanálisis y su relación con el arte, la filosofía y la teoría política. En la cátedra UBA de Luis Tossi, empezó su visión. Daba clases de psicoanálisis a empleados públicos del comercio. Eso le permitió un amplio campo de transmisión que se volvió peligroso para la dictadura.

Sobre la relación capitalismo - violencia y la subjetividad de las masas. El tipo de sujeto que genera este capitalismo.
El botín de guerra del capitalismo actual es la subjetividad. Margaret Tachter decía que "la economía es el método y el objetivo es el alma".
Ya no se trabaja con el industrialismo, ahora en neo liberalismo quiere producir subjetividades, un nuevo punto de partida. Un tipo de subjetividad vinculada sistémicamente a la violencia.
Una subjetividad que no tiene historia, cada vez con  menos recursos simbólicos, menos legados y menos herencias en las que reconocerse.
Lleva a un nuevo tipo de maldad: soy capaz de dañarme a mi mismo con tal de perjudicarte.
La pulsión de muerte supo ser muy bien colonizada por el neo liberalismo.
Todos los dispositivos neoliberales proponen al sujeto en un orden de rendimiento mas allá de sus posibilidades. Que viva la experiencia de relación consigo mismo en un dispositivo mas allá del principio del placer. En ese sexualidad, deporte y violencia se amalgaman. Surgen figuras como el empresario de si mismo, el que se debe reinventar a través de la crisis, manuales de auto ayuda, de los coach y los manager.
Esa subjetividad esta confortada a una exigencia que no puede satisfacerse nunca, entonces necesita de la auto ayuda.
Por ejemplo, Como ganar amigos.
En cualquier librería se devoró todos los géneros.

Un mundo donde el sujeto perdió las brújulas, las herencias donde buscar algo. Todo es un régimen de producción de narrativas de auto realización de uno miso, que aumentan la culpabilidad.


La izquierda debe ser conservadora, no para pensar en la revolución o en la utopía.
Se destituyen las autoridades, la figura del padre. Lo que no logró el mayo del 68 o la revuelta, lo logró el propio capitalismo. Todo lo sólido se desvanecerá en el aire decía Freud.
Los dispositivos se confirman cuando uno ve el mismo programa de producción en cada parte del mundo (son satelitales a modos de producción)

Las experiencias simbólicas que valdría la pena ser conservadas, que no fuera apropiable de entrada pro los circuitos de producción de la subjetividad son asimétricos de la expansión transversal e ilimitada del dispositivo neo liberal.
Es un gran problema de todos los proyectos que están tocados por una lógica emancipatoria.

El liderazgo que promueve el neo liberalismo, los personajes que están al frente son irrelevantes estructuralmente porque el dispositivo los puede sacrificar en cualquier momento. Demuestran insustancialidad. Se revelan como inconsistentes. Desconocen la historia, la cultura, los grandes nudos problemáticos de su propio país. Ya que armarlo es asumir los problemas que lo constituyen. En estas nuevas figuras aparece como una inconsistencia de los líderes. No tienen nada que decir, que construir como discursos.

Sobre la experiencia de la televisión Argentina y personajes singulares en los conductores.
Establece una comparación con los españoles. Los denomina "sujetos monstruosos".

El mercado se nutres de una permanente presión marcando las vidas con un ideal al que no se llega nunca. Lo ilimitado de las exigencias del capital están hechas para impedir la realización plena que se demanda (Formalizó Freud en El Malestar en la Cultura). Las depresiones, el hedonismo depresivo de los adolescentes, las patologías de responsabilidad desmedida, el sentimiento de estar en falta). Todo ello no es mas que las señales que el capitalismo contemporáneo nace con la primacía del yo y los relatos de auto realización formulados para sostenerla.
Se propaga la auto ayuda. La autoestima esconde la peor condena de la auto existencia , provocando culpabilidad por la propia finitud.

Capitalismo y Subjetividad, de Jorge Alemana, en Página 12, abril de 2016. Consultarlo. (El texto anterior es parte del mismo)

Una verdadera política, si no entendemos como esta hecho el sujeto, no es viable. (A cerca de la relación entre la política del psicoanálisis y el psicoanálisis de la política).

En el marxismo, el sujeto era colectivo. Hoy una lógica emancipatoria con las pocas armas que tiene debe estar enterada como es la condición humana: hablante, sexuada y mortal.

Define al ser humano de esta manera: el sujeto esta hecho del cruce entre el cuerpo, y el lenguaje. De lo que cruza la mortalidad de su cuerpo, lo orificios que en su cuerpo están vinculados a eros y el aluvión que se le viene necima antede de haber nacido, del lenguaje. Es un nudo de estas cosas. El sujeto esta ontológica mente mal hecho. No sabe como arreglársela con el hecho de hablar, de morir y de tener que pasar pro la sexualidad. Revelan la incompletud constitutiva del ser humano. Por eso, para tapar estos agujeros se asociada para realizar algo que momentáneamente lo libere de esta arrojado a esta condición de precariedad.
El capitalismo actual entendió esto y fabrica todo el tiempo a través de objetos que dan la imagen de completud. Sacian el deseo para reorganizar el circuito, propone que en realidad nunca lo sacian.

La izquierda perdió la capacidad de la derecha o de los sectores de poder. En la izquierda historia la satisfacción de las necesidades materiales. Pero el ser humano no solo es eso. Una vez resueltas, aparecen estas cosas de lo que es el sujeto, y necesita ir mas lejos de si. La izquierda actual debe pesar que no se puede pensar solo en un mundo de necesidades al ser humano.

La satisfacción del consumo es el núcleo de la cuestión. (Respecto del devenir de la sociedad de Venezuela).
Al haberse instituido una fuerza política distinta, se convirtió Venezuela como el foco de la irracionalidad construida mediática mente.
La pobreza mutó. Antes era definida como una escasez. Ahora en la pobreza hay drogas, plasma, marcas falsificadas, es un exceso y no un menos. La lógica del consumidor consumido esta en el seno mismo de la pobreza. La miseria actual se transformó radicalmente. Se logró que la producción de plusvalía este fuera de la lógica capital - trabajo.

Sobre la tecnología. La tecnología esconde algo que no es el instrumento en si, sino una forma de dominación en donde todo tiene que ser calculado y medido.
Se va hacia un mundo donde todo tiene que estar expuesto y cada uno emplazado a mostrarse. Es un problema de instrumentalización de las vidas. No se puede tratarla diabólicamente. Es un no y un si a la vez.

La historia le dio la razón a ALLENDE y no a Pinochet.
Estoy convencido que hay algo ... todas las experiencias populares jugaron en el capitalismo neo liberal. Si bien hubo experiencia contra hegemónicas nunca hubo hegemonías construidas como tales, de parte de las políticas populares. Aunque los medios lo traten como poderes terribles. Son siempre frágiles, inestables, contingentes. No encuentran nunca una base solida de implantación.

Una duda: si existen cosas irreversibles, como cosas que conquistó la historia y no pueden volver atrás. Nada garantiza que ciertas cosas no volverán a ocurrir.

Nos dominan estructuras de las que no tenemos conciencia. Freud mostró como estábamos sobredeterminados con esas estructuras. Marx mostró como la mercancía era una cosa misteriosa que incluso quienes la fabricaban, desconocían.
El tema es como se empezar a desentrañar esas estructuras.

Decime quien sos vos: me desconozco. Nunca podría del todo decir quien soy. Percibo la vejez como un naufragio en toda su plenitud. So y un argentino que pertenece a la generación de los setenta, con todas esas mascaras y que las asumí, que no las exalto pero tampoco me quiero desconectar de ellas. Fueron elementos que determinaron mi camino.