miércoles, 14 de enero de 2015

Sobre el daño institucional a la política en el caso del intendente Mazzone de El Bordo, Salta.


Hoy el proceso político necesita incorporar dirigentes que no crean que el poder  y la virilidad se fabrican consumiendo  cuerpos de mujeres.

Faceta de una identidad que roza la perversión, machismo y xenofobia son una característica cultural de muchos varones ligados al poder político constituido a mediados de los 90, porque reproducen lo peor de las viejas creencias políticas machistas ligadas a creer que el poder del varón se puede y se debe sostener sobre el cuerpo y la vida de quienes los siguen. Hoy creemos que no deben existir ciudadanos de segunda, sino que todos y todas podemos ser  iguales ante la ley y ante el poder y el poderoso. Esos hombres de la política nacieron poco antes de mediados del siglo xx y se vuelven anacrónicos frente a la necesidad de profundizar una sociedad de paz en democracia, a la luz de las conquistas de los oprimidos desde entonces.
La imagen de la denuncia pública.
Se observa el cuerpo desnudo y voluptuoso
del intendente en contraste con
el pequeño cuerpo de la pequeña mujer.
Una imágen habla más que mil palabras.

Sin embargo, el Intendente Mazzone no es un perverso, como dice la diputada Diana Conti desde Bs As,  sino que evidencia la manera de ser de una gran cantidad de hombres ligados al poder político que se desprestigia con su manera de representarlo. El peligro es que creen que esta bien volverse y vivir siendo poderoso y teniendo capacidad de dar protección y ayuda; sobre el desprecio de los cuerpos de algunas mujeres y sobre todo de mujeres pobres. Es el mismo desprecio que evidencian hombres como el Intendnete, en el cuerpo de los obreros varones, como quedó demostrado con el accionar de la AFIP y las condiciones de trabajo y de salario que observó en las fincas del Intendente.

Sobre los disturbios en razón de la discusión en el Concejo Deliberante para la destitución del Intendente y la intervención del municipio; resultan notorias las maneras en las cuales las mismas mujeres ligadas al poder del Intendente, lo defienden sin poder esclarecerse sobre lo que se discute. Esas mujeres y muchos de sus hombres, creen también que esta bien que haya cuerpos que sean consumidos por los poderosos, es lo que debemos contribuir a cambiar. Sin embargo es comprensible que su seguridad material y social ligada al Intendente, les impida ver  los hechos con cierta distancia, lo lamentable es que se vuelven cómplices de un mecanismo social que es perverso, por el cual el Intendente, el señor feudal, o el poderoso, puede consumir las vidas y los cuerpos de quienes lo sostienen y oprimirlos antes que contribuir desde su poder a hacerlos libres. El caso Simón Hoyos hace diez años, o todos los casos recientes de la situación laboral en fincas de finqueros ligados al poder político, observadas por AFIP da cuenta del mismo fenómeno de creer que esta bien que haya pobres que vivan en condiciones precarias.

La actitud del ejecutivo de la provincia es ejemplar en el sentido de tener la cautela de respetar la Justicia, para que investigue y esclarezca; y lo es porque respeta fundamentalmente la propia institucionalidad del Concejo Deliberante de El Bordo, quien es la primera institución en proximidad, y con autodeterminación. Sería muy peligroso para la vida institucional democrática que el Ejecutivo se apresure y asuma las incumbencias que deben ser la ultima alternativa, no la primera. En los 70, fue ese proceso justamente el que se revirtió, y tuvimos un genocidio.

Sin embargo no creemos que ..."A nivel político no hay conmoción o preocupación"… como manifestó el Ministro Sylvester en un pretendido mensaje de tranquilidad a la ciudadanía, traduciendo en gobernabilidad vertical, orden y conducción; el sentimiento de muchos y muchas funcionarios y funcionarias que se han sentido profundamente conmovidos. Porque más allá del mensaje institucional; cuando se cree representar, hay que mirar alrededor y ver lo que sienten los representados. Sino no se tiene la distancia suficiente a la de un Intendetne que cree que su represetnatividad política es justa y correcta, ya que una política emancipatoria de los pobres, vulnerados y orimidos, no se puede construir minusvalidano a los pobres, mucho menos a los representados. A nivel político hay consternación de muchos sectores y la celebración por la decisión del Gobernador de respetar la institucionalidad permitiendo la resolución entre las partes mas próximas, sin hacer abuso del poder.

Esperamos que el Intendente Mazzone asuma los errores de su representatividad y de un paso al costado, que le permita reparar el daño institucional que le hace a la política, como hombre político que es. Porque siempre se puede seguir construyendo desde otros lugares, cuando se reconoce el error.

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